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lunes, 1 de marzo de 2010

Resumen Revista Vertigo, 1 de marzo de 2010


Año IX No.467
PAN, PRI y PRD confrontan sus iniciativas de reforma política.
José Antonio Caporal

El Ejecutivo federal y los principales partidos del país (PAN, PRI, PVEM y PRD) reconocen que existe en la sociedad un malestar porque esta carece de canales de participación en la toma de decisiones; no tiene acceso a los cargos de elección popular de manera independiente; no cuenta con mecanismos para premiar o castigar a sus alcaldes y diputados y, sobre todo, porque percibe una constante confrontación entre autoridades y fuerzas políticas que lleva a la falta de acuerdos y al retraso en la aprobación de reformas legislativas que urgen al país.
Así, ante el malestar social, el Ejecutivo y los principales partidos resolvieron que es impostergable la aprobación de una reforma política que amplíe los derechos ciudadanos y, a la vez, siente las bases para que los poderes de la Unión encuentren vías institucionales que garanticen acuerdos.
Responder a las demandas de los ciudadanos independientes, por un lado, y modernizar al Estado mexicano, por otro, son las premisas que todos reflejan en sus respectivas iniciativas, aunque cada cual tiene sus propias propuestas, que en algunos casos se contraponen a las de los otros.
La iniciativa de reforma política impulsada por el presidente Felipe Calderón y respaldada por los grupos parlamentarios del PAN en el Senado y la Cámara de Diputados reconoce, a su vez, que "en el país todavía queda mucho por hacer para que la voluntad ciudadana esté debidamente representada en las decisiones democráticas, y que la democracia misma resulte útil y eficaz al ciudadano", ya que "nuestra democracia aún está lejos de expresar y representar plenamente la voz y el sentir de los ciudadanos en decisiones de leyes y políticas públicas, así como de resolver aquellos problemas que sólo pueden atenderse a través de la participación política".
La iniciativa del Ejecutivo federal y del PAN sugiere asimismo "un sistema de elección por mayoría absoluta con segunda vuelta electoral para la elección de presidente de la república: será electo presidente el candidato que en la primera vuelta obtenga más de la mitad de los votos emitidos; si ningún candidato obtiene la mayoría absoluta, los dos que hayan obtenido el mayor número de votos pasarían a segunda vuelta".
Igualmente sugiere "reconocer a la SCJN la atribución para presentar iniciativas de ley en el ámbito de su competencia". 

Año IX No.467
Nace la Comunidad de Estados latinoamericanos y Caribeños
Hacia una verdadera integración de la región
Arturo Rodríguez 

Además de la Declaración de Cancún —una serie de compromisos conjuntos concretos en materia de desarrollo social, migración, seguridad, economía y desastres naturales—, los representantes de 32 países que asistieron a la Cumbre para la Unidad de Latinoamérica y el Caribe en la Riviera Maya acordaron la creación de un nuevo bloque regional —el cual no incluye a Estados Unidos ni a Canadá— que establece como principios básicos el respeto a la democracia, las riquezas naturales y la soberanía de todos los Estados.
Al leer la declaratoria de la creación de la nueva entidad —en principio bautizada como Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELC), pero cuyo nombre no es definitivo aún—, el presidente Felipe Calderón subrayó que esta "asumirá el patrimonio del Grupo de Río y de la Cumbre de América Latina y el Caribe para la Integración y el Desarrollo (CALC)", de tal manera que ambos se fusionarán ahora en el naciente organismo.
"Finalmente hubo consenso sobre la creación de la comunidad; también una discusión muy intensa, intensas consultas, no sólo ahora, sino también país por país participante respecto del nombre de la misma. Como bien ha dicho don Raúl Castro —mandatario de Cuba—, aunque este puede ser lo de menos y que en todo caso en el curso de las cumbres que habrán de realizarse, la primera en Venezuela en 2011, sobre el acuerdo de la cumbre de integración de América Latina y el Caribe, y en Chile el año posterior, en el marco de la Cumbre de Río, podemos visualizar algún nombre definitivo, es importante ir dándonos identidad y avanzar hacia este mecanismo", afirmó el jefe del Ejecutivo mexicano.
Calderón Hinojosa detalló que "el reto que afronta la región no es un asunto de izquierda o de derecha; no es una cuestión de ideologías o de doctrinas sino más bien una disyuntiva entre pasado y futuro. Un futuro donde puedan florecer los valores en los que creemos, de democracia para la justicia en la libertad".
Al presentar los acuerdos alcanzados en la Cumbre para la Unidad de Latinoamérica y el Caribe, el mandatario mexicano pidió a los 32 delegados presentes en la sesión —25 de ellos jefes de Gobierno— lograr un diálogo permanente que promueva la paz internacional.
En el encuentro de dos días —22 y 23 de febrero— también se abordó, por separado, el tema de Haití, al acordarse la entrega inmediata y en efectivo de 25 millones de dólares adicionales para apoyar la reconstrucción de la isla, además de un paquete crediticio de corto plazo, según anunció el presidente Felipe Calderón, quien dijo que el gobierno mexicano se comprometió a intentar conseguir en las próximas tres semanas 50 mil tiendas de campaña y cinco millones de dólares para ayudar a los más de un millón de haitianos que quedaron en la calle y que vieron complicarse su situación debido a las fuertes lluvias que cayeron en los últimos días en esa nación.
Se aprobaron también pronunciamientos en contra del bloqueo de Estados Unidos a Cuba; sobre el conflicto de las Malvinas entre Argentina y el Reino Unido, así como otro de apoyo a Ecuador, luego de que su presidente, Rafael Correa, denunció que un organismo internacional incluyó a su país en una lista de naciones que lavan dinero con fines terroristas.
Principios
"Los presentes hemos decidido, primero, constituir la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños como espacio regional propio que reúna a todos los Estados de la región, y consolidar y proyectar a nivel global, mediante la comunidad, la identidad latinoamericana y caribeña", se lee en la declaración final de la cumbre.
Entre los principios que regirán al naciente esquema destacan el respeto al Derecho Internacional, igualdad de Estados, no uso ni amenaza de la fuerza, democracia, respeto a los derechos humanos y al medio ambiente, cooperación internacional para el desarrollo, unidad internacional y un diálogo que promueva la paz y seguridad regionales.
Asimismo, busca mejorar el posicionamiento de América Latina y el Caribe frente a acontecimientos relevantes; promover la integración política y esquemas de diálogo con otros grupos de países para fortalecer el escenario internacional; además de la articulación, coordinación y complementariedad entre organismos subregionales.
También, integrar la capacidad de diálogo dentro de la región y con otros Estados y actores, así como promover mecanismos de solución pacífica de controversias.
Respecto de la Declaración de Cancún los presidentes analizaron y discutieron los 87 compromisos conjuntos en materia de desarrollo social, migración, seguridad, economía y desastres naturales, cuyo borrador fue elaborado por los ministros de Relaciones Exteriores de la región.
Hubo coincidencia, asimismo, en una mayor cooperación ante las nuevas amenazas a la seguridad, como el terrorismo, los estupefacientes, el crimen transnacional organizado y el tráfico de armas; y en materia económica se plantea que los ministros de finanzas diseñen una estrategia para crear una arquitectura financiera regional.
De acuerdo con el documento aprobado por los mandatarios, tanto el CALC como la Cumbre de Río seguirán con la agenda programada para las reuniones previstas hasta 2012, cuando oficialmente se ponga en marcha la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, pues falta definir sus estatutos y formas de operación, lo cual podría concretarse durante la Cumbre de Río que el año entrante se llevará a cabo en Venezuela.

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